Hace apenas medio año caía en mis manos, más bien por casualidad o rebote, un libro titulado Muerte en el laberinto, un thriller —el segundo— de una serie protagonizada por un inspector de policía llamado Ignasi Requesens. El contexto histórico era la Barcelona de 1909 (Semana Trágica, Guerra del Rif,…) y el argumento, un crimen ocurrido en el jardín más antiguo de la Ciudad Condal: el laberinto de Horta. Descubría, de esa manera, a un escritor cuya calidad narrativa me asombró gratamente por su perfecto potencial y su cuidado por los detalles, especialmente en lo relativo a lo histórico. Fernando García Ballesteros (Barcelona, 1970) se convertía así en un autor al que seguirle la pista.
Asesinato en el catafalco
Barcelona 1909. Con la sombra aún fresca del atentado del Gran Teatro del Liceo en 1893 a manos de los anarquistas en el que perecieron 20 personas, al inspector Requesens se le encomienda la misión de cubrir la seguridad de un baile de máscaras en el mismo, al que había acudido gran parte de la sociedad burguesa de la época, incluida Victoria, la condesa de Cardona, anfitriona principal y la organizadora de dicho baile. Pero el aburrimiento y la tranquilidad del mismo desfile se trunca cuando, en el catafalco y en una posición respetuosa, la condesa aparece muerta. El asombro por el asesinato se transforma en perplejidad cuando en su mano se encuentra una pequeña piedra preciosa desaparecida mucho tiempo atrás: el rubí de la familia Cardona.
Fermando García Ballesteros
Nunca he sido de leer a escritores por sus ventas o porque sus obras se hayan convertido en bestsellers. Es cierto que algunas de las que hay en mi librería son grandes novelas, y otras simplemente están llenas de páginas que sirven para pasar un rato agradable, distraerme y dejarlas de nuevo ahí. Cada una de ellas cumple una función determinada, pero en realidad el tema de las ventas es indiferente porque lo que de verdad importa es la relación que uno establece con la historia que nos cuenta el autor de un libro. Y más concretamente, con cómo nos la cuenta.
Una novela con poder
El crimen del Liceo no es un bestseller y posiblemente nunca lo será, cosa que debo decir que es una pena porque la manera como está narrado, la gran calidad de los detalles, las descripciones minuciosas, el intento por la verosimilitud de lo explicado y especialmente el gran trabajo de documentación que hay detrás y el contexto histórico en el que envuelve ese suspense (a los que algunos enganchará hasta el final), son los matices que le dotan de poder y por los que realmente merece la pena
Ballesteros se sirve de la historia de Barcelona para recrear una ficción y tira de edificios emblemáticos, apellidos aristócratas y sucesos relevantes para dotarla de esa verdad que nos hace dudar dónde está la línea que separa realidad de invención. Y eso es lo que atrae a un lector.
Título: El crimen del Liceo
Serie: Inspector Requesens 1
Autor: Fernando García Ballesteros
Editorial: Libros de Seda
Páginas: 384
Género: thriller histórico
Fecha de publicación: 2020
Un comentario en “El crimen del Liceo – Fernando García Ballesteros”