Hacía mucho que no me embarcaba en una distopía y lo he hecho con una historia que me ha dejado un gratísimo sabor de boca, El yugo de cristal de Eva Vida, una aventura a través de desiertos abrasadores con grandes dosis de acción.
La humanidad ha hecho caso omiso a los avisos que científicos llevaban años dando sobre el cambio climático y el buen uso de los recursos naturales, y esto ha hecho que, en un futuro no tan lejano, unos pocos afortunados sobrevivan a las condiciones adversas del exterior, protegidos por inmensas cúpulas de cristal donde solo unos pocos privilegiados viven con grandes comodidades. Mientras que fuera de allí, las temperaturas extremas y las zonas cubiertas exclusivamente por arena se extienden kilómetros y kilómetros donde viven personas que se han convertido en salvajes que luchan por conseguir una gota de agua.
La verdad es que cuando una distopía está bien cimentada te consigue poner los pelos de punta por lo real que nos puede resultar. Es el que caso de la que nos presenta Eva, nos ofrece un futuro que no me parece tan «fantástico», ni tan imposible sino todo lo contrario visto cómo estamos malgastando los preciados bienes que nos ofrece la madre naturaleza.
Brin, la protagonista absoluta de la historia, es una recluta de la Academia militar instruyéndose para convertirse en soldado. Pero Brin no es una ciudadana cualquiera; es la princesa, la hija del presidente de su país, y trata de demostrar su valía como el que más para evitar sospechas de favoritismo. Vive en Samûn protegida bajo una cúpula de cristal y por primera vez va a salir de esa protección en una misión del ejército para transportar víveres a un destacamento. Poco imaginaba que ese viaje le iba a cambiar la vida.
El yugo de cristal tiene tres partes bien diferenciadas. En la primera, seguiremos a Brin en su periplo mientras la autora nos presenta la sociedad en la que se desarrolla la acción. Iremos conociendo todos los entresijos de la misma y, al mismo tiempo que la protagonista veremos lo que sucede fuera de los muros de cristal. A pesar de estar narrada en tercera persona, comprenderemos los sentimientos de Brin y todo lo que le va pasando la cabeza a medida que va avanzando en su viaje.
En la segunda parte, en algunos capítulos seguiremos las andanzas de Brin y en otros los de otro personaje. Cada uno de los capítulos viene precedido del nombre de su protagonista. De esta manera, la historia va aumentando el ritmo y veremos la acción desde varios puntos de vista distintos.
La tercera es un final épico donde la acción ya ha alcanzado el punto álgido y el desenlace será de lo más satisfactorio, a pesar de que esta aventura no ha hecho más que empezar y nos queda mucho por saber de esta historia. Eva responde muchas preguntas, pero nos deja varios frentes abiertos que hacen que deseemos que la continuación llegue lo antes posible.
Aparte del entretenimiento nos encontramos con un mensaje muy crítico sobre nuestra relación con el medio ambiente y el uso que hacemos de los bienes a nuestro alcance, lo que nos hará reflexionar sobre si aún estamos a tiempo de hacer que nuestro futuro no sea como nos lo presenta la autora.
Eva Vida debuta en el mundo literario con una apuesta arriesgada pero muy bien construida. Con un buen estilo narrativo, una base argumental sólida, unos personajes bien construidos –consejito: no te encariñes mucho de ellos, que no le tiembla el pulso a la hora de cargárselos– tiene todos los ingredientes para triunfar y hacer disfrutar a todo aquel que se adentre en este universo de desierto y cristal.
Título: El yugo de cristal
Autora: Eva Vida
Editorial: Knowmadas
Páginas: 670
Género: ciencia ficción
Fecha de publicación: abril 2024
Marta entre libros 