Hay ocasiones en las que un libro nos despierta tal cantidad de sentimientos en el interior que es muy difícil poder transmitirlos. Hace un par de semanas que terminé Todas las veces que se te acelera el corazón, de Carmen Arteaga (1984), y tras esta pausa reposando la novela, sigo sin tener muy claro que pueda expresarme en condiciones, pero ahí voy.
La obra llegó a mí casi por casualidad y me encontré con una de esas joyas literarias que no solo cuenta una historia, sino que también me ha sumergido en las emociones de sus personajes de una manera tan vívida que he sentido sus alegrías y tristezas como si fueran propias, me he metido tanto en sus vidas que he sufrido, me he entusiasmado, deleitado e incluso me ha arrancado unas lágrimas con el paso de las páginas.
Carmen, a través de sus personajes meticulosamente desarrollados de los cuales os hablaré en breve, nos lleva por un viaje emocional que nos hace reír, llorar y, sobre todo, reflexionar sobre las complejidades de la vida. Confieso que en los capítulos finales tuve que aparcar un rato el libro porque tenía el corazón tan acelerado que temía que me fuese a explotar. Y sinceramente, pocas veces me he sentido así con una lectura.
En el corazón de la narrativa se encuentran los personajes, seres humanos complejos y realistas que enfrentan desafíos y obstáculos de la vida cotidiana. Sus luchas, triunfos y derrotas están hábilmente entrelazados, creando un tapiz emocional que resuena profundamente en nosotros. La autenticidad de estas experiencias humanas es lo que hace que este libro sea tan poderoso. Cada página está impregnada de una pasión palpable por la vida y una celebración de la resistencia humana.
Todas las veces que se te acelera el corazón comienza in media res, con un prólogo tan potente, devastador, a la vez que intrigante, que es una presentación a una experiencia de la que sabes que no vas a salir del todo ileso. Tras esta flecha directa al pecho, la narración se traslada a casi tres años antes, dejándote en ascuas por el devenir de los eventos.
Pero este salto hacia el pasado es indispensable para llegar a conocer a fondo al trío protagonista y permitirles que te dejen ser testigo de sus vidas, de sus historias, sus miedos y sus sueños. En un principio os los iba a presentar y así enlazar un poco con el argumento, pero he decidido no hacerlo al final. Os invito a que deis un salto al vacío, que os enfrentéis a esta novela a ciegas casi como hice yo, y simplemente disfrutéis del viaje.
Arteaga nos expone temas cotidianos, que vemos a nuestro alrededor día a día, que incluso nos han podido afectar directamente. Temas que duelen muy muy dentro. Resulta fácil identificarse con los personajes, ya sea por vivencias similares o igualmente equiparables. Nos recuerdan la belleza efímera de la existencia y la importancia de aferrarse a cada momento, incluso cuando la vida nos presenta desafíos aparentemente insuperables. La forma en que ellos encuentran esperanza en medio de la adversidad es inspiradora y nos hace reflexionar sobre nuestra propia capacidad para superar las dificultades. Y sí, puede que la razón por la que he tardado un poco en haceros llegar estas palabras esté relacionada con esto, porque he necesitado tiempo para darme cuenta de mis miedos y darme fuerza para superarlos.
La novela ha conseguido hacerse un hueco entre los cinco finalistas al Premio Literario Amazon Storyteller 2023 en una lucha de más de 3000 participantes y espero que consiga el galardón, sería muy merecido.
Y no olvidéis que vivir es sentir todas las veces que se te acelera el corazón.
Título: Todas las veces que se te acelera el corazón
Autora: Carmen Arteaga
Editorial: autopublicado – Amazon
Páginas: 456
Género: novela romántica
Fecha de publicación: mayo 2023

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